Ancelotti se saltó su propio guión y presentó un equipo cargado de suplentes: Lunin, Lucas Vázquez, Nacho, Marcelo, Camavinga, Valverde, Jovic y Rodrygo (llegados a este punto, ya no sabemos si Rodrygo es titular o suplente de Asensio). En definitiva, el tipo de rotación que muchos le demandan. ¿El resultado? Al equipo le faltó de todo. Ningún suplente fue capaz de demostrar al entrenador que se merece otro rol. Quedó claro que en el banquillo no hay tanta calidad como algunos piensan. El Madrid solo fue superior al Elche en los minutos finales. Lo consiguió con más orgullo que fútbol, con diez hombres por la expulsión de Marcelo en la prórroga y perdiendo 1-0. Para entonces ya estaban Modric y Casemiro sobre el campo…
ALINEACIÓN: (4-3-3) Lunin; Lucas Vázquez, Nacho, Alaba, Marcelo; Camavinga, Kroos, Valverde; Vinicius, Jovic, Rodrygo.
EL PLAN: Siete cambios en el equipo de gala mostraron un Madrid muy diferente. Hubo momentos de un dinamismo poco frecuente, pero el juego fue poco sólido y falto de mecanismos.
LO MEJOR: Por encima del juego, el carácter ganador y rebelde de este equipo ante la derrota.
LO PEOR: El pobre rendimiento de muchos de los suplentes.
LA CLAVE: Un intangible que va en la historia, el escudo o el ADN de un equipo que nunca se rinde.
Uno por uno:
Ancelotti: Pese a tener el balón, con un gran Kroos y un notable Camavinga, el equipo no logró crear peligro y tuvo muchas dificultades para defender a un Elche sin complejos. Tardó mucho en realizar los cambios (Marcelo, Valverde y Rodrygo). Al sustituir a Jovic apostó por cuatro centrocampistas sin una referencia arriba. El invento no se pudo testar, pues la expulsión de Marcelo cambió el decorado.
Lunin: Apenas tuvo trabajo. En las dos veces que se le exigió se mostró muy seguro. Despejó con solvencia un remate de cabeza de Carrillo y más tarde un lanzamiento de falta con mucho peligro. Bien en su juego con los pies. Dudó en algunos balones altos a los que debería haber salido.
Lucas Vázquez: Trabajó mucho en su banda y se mostró seguro en defensa, aunque no hizo valer sus condiciones como atacante. Sin desborde. Falló mucho en centros sencillos.
Nacho: Tardó en asentarse en el partido y cometió algunos errores posicionales que facilitaron algunas recepciones de los atacantes del Elche en zonas de peligro. Le costó dominar el área. Poco a poco fue creciendo en el partido y ajustando su posición.
Alaba: Todo lo bueno que hizo en el partido fue cuando tuvo la pelota. En defensa se volvió a mostrar como un jugador sin jerarquía en el área y con problemas para defender balones bombeados. Cuando pisó campo contrario demostró el futbolista de clase que es.
Marcelo: No puede jugar de lateral. Lento hasta límites insospechados, sin retorno defensivo y perdedor en duelos individuales. Su presencia en la defensa es un problema en estos partidos. En ataque sigue teniendo gestos de gran calidad técnica, pero su falta de velocidad le deja muy lejos del jugador que fue. Su tendencia a adornarse contagia a Vinicius. Cada minuto que juega es un minuto que le roba al futuro: se debería aprovechar este tiempo para averiguar si Miguel Gutiérrez vale para el primer equipo.
Valverde: Preocupante el mal partido del uruguayo. Desconectado del juego, torpe en la circulación del balón y sin complicidad ni con Rodrygo ni con Lucas Vázquez. Exageró los arrastres, lo que empobreció el juego de toque del mediocampo. Valverde no termina de dar el paso al frente. En cada partido que juega genera más dudas sobre su evolución.
Camavinga: Comenzó el partido muy atento para no perder la posición y jugando la pelota con calidad y rapidez, mezclando muy bien con Kroos. Corrió con inteligencia y supo desdoblarse en ataque en varias ocasiones en las que remató con cierto peligro. En la segunda mitad le costó mantener ese ritmo de juego y fue de más a menos. Volvió a dejar claro que puede ser un notable mediocentro si se le pulen aspectos de su juego.
Kroos: Movió al equipo con calidad e intención como en él es ya habitual. No obstante, le faltaron socios para dinamizar el juego del Madrid, ya que ni Valverde a su derecha, ni Jovic por dentro y recibiendo de espaldas, se acercan a la calidad que le aportan en la asociación Modric y Karim.
Rodrygo: Lejos del jugador incisivo de otros encuentros. Le costó dar verticalidad a su fútbol y volvió a perder demasiados duelos individuales. Dejó algunos gestos de calidad en acciones aisladas, pero que se marche de un partido así sin apenas un remate a portería vuelve a plantear la duda de quién es el dueño de la banda derecha.
Jovic: Recibió mucho juego de espaldas y le supo dar continuidad, pero casi siempre sin dañar al rival ni acelerar las jugadas. Torpe en varias acciones de uno contra uno, en las que siempre perdió los duelos. Le faltó velocidad en algunas acciones que podrían haber llevado más peligro.
Vinicius: Saltó crispado al campo, con continuas protestas. Muy lejos de la chispa y el acierto en los últimos toques del inicio de temporada. La presencia de Marcelo junto a él le lleva a adornar innecesariamente muchas jugadas. Corrió mucho en defensa, pero tal vez deberían dosificarse algo más.
CAMBIOS:
Casemiro: Entró en el 71′ por Camavinga. Su presencia más que su fútbol dio algo de poso al juego blanco. Tuvo dos buenos remates que en ambas ocasiones terminaron en nada. Terminó el partido como central.
Modric: Entró en el 71′ por Valverde. Le costó entrar en juego, pero cada vez que participó mejoró la jugada. Le dio temple y calidad a la salida desde atrás, pero casi no tuvo presencia ofensiva.
Isco: Entró en el 79′ por Jovic. Como ocurre con Kroos o Modric, Isco tiene una calidad individual top. Pero como se vio en la jugada de la expulsión de Marcelo, su físico no está para la élite. Dejó tres o cuatro gestos técnicos de gran calidad, pero el campo se le hace muy grande.
Hazard: Entró en el 91′ por Rodrygo. Con la expulsión de Marcelo, el partido pintaba mal para el belga. Situado como extremo derecho, al quedarse el Madrid con diez jugadores, centró su posición. Apenas participó, pero tuvo el mérito y el temple de saber finalizar un contragolpe con error defensivo ilicitano para hacer el 1-2.
Ceballos: Entró en el 91′ por Kroos. En su segunda aparición sobre el campo volvió a dejar buenas sensaciones. Buscó la pelota y no le quemó el balón en los pies. Pude que él y Camavinga sean la mejor noticia de entre los suplentes que jugaron.
Mendy: Entró en el 118′ por Vinicius para dar solidez defensiva en los últimos minutos y perder tiempo.