Tras hacerse oficial el calendario de la parte final de la recientemente finalizada Copa de Europa, Klopp rápidamente vio la otra cara de la moneda. Lo siento por los equipos que aún tienen que jugar, dijo, porque les va a costar más prepararse para la temporada que viene.
Nadie ha tenido una pretemporada al uso, si es que cruzarse el mundo en torneos que se disputan en Asia o Norteamérica es hacer una pretemporada, pero tras estos partidos iniciales parece que Klopp tenía las ideas más claras que la mayoría de sus rivales. El Liverpool ha acudido al mercado a por dos jugadores, Jota y Thiago. Por lo que se refiere a Diogo Jota, el fichaje ha sido una sorpresa para los medios, que no le tenían en las quinielas. Llega para dar minutos tanto a Salah como a Mané y tiene pinta de encajar perfectamente en el juego de Klopp.
Thiago ofrece otra cosa. Si Klopp llegó a Liverpool con su estilo heavy metal, hoy en día los decibelios se han rebajado paulatinamente a cambio de controlar el juego un poco más. Para entendernos, y agradeciendo la sugerencia a Perikorro, nuestro musicólogo de cabecera, podríamos decir que el estilo del equipo se ha convertido en un “rock sinfónico”. Simplificando, Thiago le va aportar al Liverpool un punto de calidad y elaboración a su centro del campo que hasta ahora solo tenía la función de recuperar el balón y dárselo a los tres puntas lo más rápido posible. Thiago les hará llegar el balón en mejores condiciones y añadirá un punto de control y pausa en la circulación del balón.
Jota jugó unos minutos ante el Arsenal, en los que tuvo la oportunidad de marcar su primer gol. Thiago fue baja, pero su concurso no fue necesario para que el Liverpool se impusiese. Lacazzette hizo el primer gol tras un error de bulto de Robertson al controlar un mal centro al área. El francés remató en semifallo o fallo completo pero bastó para superar a Alisson. Tuvo una oportunidad más en la segunda parte, a pase de un Ceballos que entró en la segunda parte, pero el Arsenal no fue rival. Arteta sigue progresando, pero el camino es largo.
Quizá no sea justo medir al Arsenal con el Liverpool. El equipo de Klopp es claro favorito a ganar la Premier, con el City, el rival más cercano, aún con problemas por resolver. El resto de los equipos punteros son parejos en su nivel y entre ellos se restarán puntos, mientras el Liverpool ya ha ganado a Chelsea y Arsenal sin mayores apuros.
Ante el Arsenal no hizo falta que el Liverpool llegase a la quinta velocidad. Tras recibir el 0-1, los goles de Mané y Robertson llegaron rápido. La segunda parte transcurría con el 2-1 más seguro que se pueda imaginar. Es solo un gol y los tópicos dicen que en cualquier jugada te empatan, pero el Arsenal no creaba peligro y los dos córners que sacaron no pasaron del primer defensa.
El partido se fue apagando como los días de sol, ya casi extinguidos en las islas británicas hasta el año que viene. Aún tuvo tiempo Jota de rematar a gol en un par de ocasiones, la segunda con acierto. Un 3-1 que quizá marque la distancia entre el Liverpool y los aspirantes a los primeros puestos.
A día de hoy,Klopp es el mejor entrenador para todo tipo de equipos.Si tiene técnica,hará rock sinfónico,si no la tiene,heavy metal(creo que podría llegar a nivel Sepultura,death metal).Un plan para cada situación y las cosas claras,y funciona.Tan claro lo tiene todo que los fichajes suelen servirle para lo que pretende de ellos.Sabe qué le da cada jugador.Y eso da seguridad.Además no evangeliza.
Y el Arsenal,(in Arteta we trust)como siempre en los últimos 10 años,para ganar un partido tendrá que 1) meter dos goles al menos,porque pocas veces se mantiene a cero Y/O 2)marcar primero porque se desangra tratando de empatar.
Bueno,el Liverpool mola mucho también.