Al igual que Collin Smith en la magnífica película de los años sesenta, Zidane corre contra el mundo. Lo hace solo, sorteando obstáculos (de dentro y fuera del club) y mezclando la realidad del presente con los flashbacks de tres Champions conquistadas. Champions que ya empiezan a desteñir tanto para algunos, que casi recuerdan a las que se consiguieron en blanco y negro cuando España era una dictadura y Europa tierra conquistada por el Madrid. Cardiff ya huele a naftalina.
Zidane corre sabiendo que no tiene la confianza de la planta noble, que se dejó buena parte del crédito volviendo doce partidos antes de tiempo y que tiene miles de escopetas cargadas apuntando hacia sus tres primeros partidos de Liga. Después llegará el parón de selecciones. Tres malos resultados serían quince días de infierno mediático y dos semanas para que Florentino haga círculos en el calendario para elegir la fecha en que sería cesado. El presidente tiene mucho peligro con un rotulador en la mano.
Aún así, como en el filme de Richardson, tener todo en contra no hace que haya que dejar de correr. Tirar la toalla o quedarse parado no es una opción. Menos aún para el que ha robado (metafóricamente) en la panadería de los defensores de Llorente y Ceballos —y no es consciente de que eso sea delito en el mundo del fútbol—, porque a él solo le parecían pan de molde. Obviamente, tampoco es bueno marcharse sin pagar de la boutique de los defensores de la táctica pura. Si quieres ser alguien en esto, hay que ser más Guardiola y menos Del Bosque. Ganar tres Champions y una Liga en dos años y medio no te da derecho a ser TOP, para eso es mejor saber ordenar un bloque de presión adelantada y dar lecciones de fútbol en las ruedas de prensa. Si quieres ser César, enseña la toga, aunque no pases el Rubicón ni con la ayuda de todas las legiones del Imperio de Oriente y Occidente.
Así que, de momento, Zidane sigue corriendo. Piensa que su guardia pretoriana, esa que ganó por él y con él, en algún momento le dará el relevo o, al menos, el litro de Gatorade que le ayude a llegar a la meta. Craso (vaya, esto parece que va de emperadores romanos) error. Alguno ya no está ni para un gol regañao. Lo mismo acabamos escuchando un… ¿Tu también, Kroos?
Da igual. Pese a mil hándicaps, a no tener derecho a querer a Pogba (es caro, 1.300 millones después, Pep sí es el mejor entrenador del mundo) y a ver siempre más proas (las que le ponen) que popas, Zidane sigue siendo enjuto, fibroso y mantiene buena zancada. Que siga corriendo. No va a ganar la carrera. Eso lo sabemos todos. Una cuarta Champions sería el resultado de su flor en el culo o de lo bien que ficha Florentino. El mérito de Zizou no es más que el que en su día tuvieron Muñoz, Molowny o el mencionado Del Bosque. Ninguno de ellos le aguantaría una frase a Bielsa.
Pero a mí, no lo puedo evitar, me encanta verle correr. Ante la soledad del corredor de fondo, el agradecimiento por todas las noches felices que su Madrid me hizo pasar. Habrá que buscar un confesionario de guardia.
Hay un dilema latente en el mundo del entrenador . La cuestion en si. trata que para ser un buen entrenador hay que haber jugado antes profesionalmente yo no sé la respuesta, de hecho, conozco muchos ejemplos de entrenadores cuyo problema es precisamente ese. haber sido profesional y precisamente por eso, buscar erroneamente estilos y jugadores antagónicos en lo que ellos habian sido profesionalmente, dando por resultado una mala solucion…..pongamos ejemplos para entendernos. Camacho abusaba de jugadores demasiados tecnicos y poco fiscos, Clemente abusaba de jugadores demasiados defensivos y etc etc.
En la otra parte de la cuestion, tambien hemos visto entrenadores que no saben manejar ni vestuarios, ni jugadores . de hecho en algunos casos de no entender el juego por el simple hecho de no haber sido futbolistas.
Visto estos matices,yo no sé responder a esa cuestion, pero si he decir que hay entrenadores que han sido futbolistas y no entienden y hay aficionados que aunque se empapen de futbol día tras dia, nunca sabrán de futbol aunque les encanten opinar
Intentaré ser mas preciso en este comentario porque entre las prisas y las faltas no se entiende muy bien el anterior.La conclusión basicamente es : Zidane no se entera y el autor de este post idem de idem, por mucho futbol que uno mame, si tiene las ideas de Gaspar, de Roberto Gomez o de Gregorio Manzano, nunca irán bien las cosas.
Al Zidane entrenador hay mucho que agradecerle, por su forma de ser y su gestion en forma de títulos de orejonas,pero noches felices de futbol,va a ser que no y si acaso, poquísimas en un periodo demasiado amplio. Hay dos frases grabadas a fuego en el Madridismo. La primera, la de la BBC es insistituible y la segunda, en esta nueva etapa, de que hará una revolución en el once.
Sobre la primera, nunca un entrenador puede decir eso y menos hacerlo como lo hizo cayendo en la obstinación. Sobre la segunda, mas bien lo contrario, no se puede decir que voy a cambiar casi todo repetidamente para no tocar practicamente nada.
Mas allá de meteduras de patas orales, la labor de un entrenador se refleja en dos aspectos : La optimacion de los recursos de sus jugadores y la mecanizacion del juego en el equipo. En estos dos fundamentos, la labor de Zidane es muy deficiente, con el resultado de que ningun jugador progresó durante su trayectoria y que el juego del madrid tiene de coral y grupal lo que el ejército de anarquia.
A pesar de esto, nuestro autor de este post nos antepone que hay que respetar sus decisiones y nos emplaza a ver el resultado final de la carrera porque si Ceballos, Requilon, Acraft, Hermoso, James y Vinicius no le valen, por algo será .
….. Efectivamente sr Mariano, respetemos al Cholo Simeone y veamos que tal funcionan LLorente y Hermoso después de dejarse un pastizal en su contratación ….respetemos a Emery que se ha dejado un huevo en forma de cesion de Ceballos….respetemos a James que es el lider de Colombia y hace bastante poco era el mejor jugador del mundial…. y de paso respetemos a nuestros jovenes, que posiblemente serán grandes como Vinicius,Rodrigo, Kubo y Valverde.
Nos podemos tapar los ojos y hacer lo que usted dice, como un Roberto Gomez cualquiera, pero sepa que esta carrera de fondo, pese a tener una Yamaha, escuderia Ferrari y patrocinio del Down Jones entero, Zidane no la termina porque no entiende