El miércoles se difundió la noticia del posible fraude fiscal cometido por el delantero del Atlético de Madrid, Diego Costa. Al parecer, el hispano-brasileño habría evitado declarar cerca de 800.000 euros percibidos en 2014 en concepto de derechos de imagen. No es el primer futbolista que tiene problemas con Hacienda. Desde hace ya algunos años la lista de deportistas que son investigados por el Fisco es creciente.
En casi todos los supuestos de los futbolistas presuntamente implicados en delitos fiscales hay varias coincidencias. En la inmensa mayoría de los casos se trata de delitos relacionados con declaraciones irregulares de los derechos de imagen. Además, hay un grupo muy concreto de futbolistas, representados por el agente Jorge Mendes, que han coincidido en en el cómo, el cúando y el dónde.
Es el caso de Cristiano Ronaldo, James Rodríguez, Ricardo Carvalho, Pepe, Jose Mourinho, Radamel Falcao, Ángel Di María y Fabio Coentrao. Todos están representados por Gestifute, empresa de la que es máximo accionista Jorge Mendes. Además de coincidir en agente y en que el dinero supuestamente defraudado provenía de los derechos de imagen hay otras similitudes. En casi todos los casos la forma de fraude es la misma: los futbolistas habrían cedido sus derechos de imagen a empresas offshore con sede fiscal en paraísos fiscales (sobre todo Panamá y las Islas Vírgenes Británicas) para evitar tributar el IRPF en España. Por último, todas las irregularidades fiscales en las que se han visto implicados este grupo de futbolistas están acotadas entre 2010 y 2014.
En el caso de estos futbolistas se cree que las sociedades a las que cedieron sus derechos de imagen, de las que siempre eran los únicos socios, acabaron cediendo a su vez dichos derechos a la sociedad irlandesa Multisport & Image Management LTD (MIM). Esa sociedad ha sido relacionada por Hacienda con el superagente Jorge Mendes. Hecho por el que el portugués ha tenido que declarar en varios de los juicios en los que sus representados se han visto implicados. De hecho, Multisport & Image Management LTD trabaja de la mano con otra sociedad, Polaris, dirigida por Luis Correia, sobrino de Mendes, y de la que el agente tiene un tercio de las acciones.
La sociedad irlandesa fue, en todos los casos menos el de James, a la que las empresas gestoras de los derechos de imagen de los futbolistas acabaron cediendo dichos derechos de explotación.
Cristiano Ronaldo
El futbolista portugués, ya condenado por la Audiencia Provincial de Madrid, aceptó una condena de 23 meses de prisión por fraude fiscal, conmutable por el pago de 18,8 millones de euros. Se le acusó de defraudar 14,7 millones de euros entre 2011 y 2014 en concepto de derechos de imagen.
El cinco veces ganador del Balón de Oro suscribió un contrato de trabajo con el Real Madrid el 21 de junio de 2009, trasladando semanas después su residencia a España. Por lo tanto, el jugador adquirió la condición de residente fiscal en España, con las obligaciones que ello conlleva.
La acusación señaló que tras confirmar el Real Madrid las condiciones fijadas y, “con la intención de obtener un beneficio fiscal ilícito cuando llegara a España”, simuló ceder la totalidad de sus derechos de imagen a la sociedad Tollin Associates LTD, con domicilio fiscal en las Islas Vírgenes Británicas, territorio que es considerado como un paraíso fiscal. El portugués figuraba como único socio de dicha sociedad.
Por su parte, Tollin Associates LTD, mediante un contrato privado, cedió la explotación de los derechos de imagen de Ronaldo a la sociedad Multisport & Image Management LTD, domiciliada en Irlanda.
James Rodríguez
Es el único de esta lista de futbolistas que, a pesar de haber declarado de forma irregular, no ha cometido, según Hacienda, ningún delito fiscal sino que simplemente “no tributó correctamente”.
En el caso del colombiano, resulta que vendió la explotación de sus derechos de imagen a Jorge Mendes por un valor de 12 millones de euros mediante un contrato firmado en Casablanca. El futbolista tributó como no residente en España y, por lo tanto, solo pagó impuestos por una pequeña cantidad del total del dinero percibido.
Finalmente, aunque la maniobra de James, siempre de la mano de Mendes, no llegó a constituir un delito a ojos de Hacienda, el colombiano tuvo que abonar 4,9 millones de euros. Este dinero es el que estimó el Fisco que debía pagar de diferencia por no haber tributado como residente en España.
Ricardo Carvalho
El ex futbolista del Real Madrid aceptó una pena de un año de cárcel, conmutable por el pago de 800.000 euros por un delito de fraude fiscal. Carvalho, al igual que su compatriota Cristiano Ronaldo, cedió sus derechos de imagen a una sociedad en las Islas Vírgenes Británicas llamada Alda Ventures, de la que también era el único socio. A su vez, esta sociedad cedió sus derechos a la ya citada firma irlandesa MIM, que posteriormente los cedió a Polaris, la sociedad dirigida por el sobrino de Mendes.
En el caso de Carvalho, cuando cedió sus derechos a la sociedad de las Islas Vírgenes Británicas, Hacienda ya había denunciado el caso ante la fiscalía y esta al juzgado. De hecho, días antes de publicarse la noticia en Footballeaks, Carvalho entregó el dinero reclamado por el juzgado con la intención de conseguir el atenuante de reparación del daño. Como puso el dinero a disposición del juzgado antes de que pasaran dos meses tras ser denunciado, se le aplicó lo que se llama un superatenuante, y la pena fue rebajada en dos grados.
Pepe
El 11 de diciembre de 2015, la Agencia Tributaría abrió un caso a Pepe por, presuntamente, un fraude fiscal de 3,7 millones de euros. La investigación es en relación a las rentas obtenidas entre 2010 y 2013 por, igual que los demás futbolistas, sus derechos de imagen.
Al parecer, el portugués también habría recurrido a una empresa offshore en las ya conocidas Islas Vírgenes Británicas. La sociedad, de nombre Weltex y con Pepe como único socio, habría gestionado los derechos de imagen del jugador para, después, cedérselos a la firma irlandesa MIM.
El expediente del ex del Real Madrid no se ha cerrado, sin embargo, los indicios muestran claras coincidencias con el proceder de los demás representados por Jorge Mendes también implicados en supuestos delitos fiscales. Por su parte, el jugador declaró cuando saltó la noticia estar “al corriente” de sus “obligaciones fiscales”. Tampoco ha dudado en enfrentarse en las redes sociales a periodistas que lo han acusado de defraudador.
Pepe? Yo? acusado de fraude fiscal ?!? No me añada al texto para hacer lista. Esto de escribir en Twitter es muy sencillo. Hacer periodismo y informar con la verdad…bueno, eso es para pocos.
— Pepe (@officialpepe) 26 de julio de 2018
A ver si aprende tambien lo que es contrastar y veracidade. El único órgano al que debe recurrir para contrastar ese tipo de información es Hacienda o Fiscalía. Así que lo que “buscamos” y “encontramos” en Google vale lo que vale, periodismo es más que eso.
— Pepe (@officialpepe) 26 de julio de 2018
Jose Mourinho
El entrenador portugués, ex del Manchester United y del Real Madrid, llegó a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía de Madrid hace unos meses por el que ha sido condenado a un año de prisión, conmutable por una multa de 2,2 millones de euros.
Siguiendo el mismo proceder que los demás representados por Jorge Mendes, Mourinho constituyó una sociedad en las Islas Vírgenes Británicas con el nombre de Koper Services SA, de la que era el único accionista, a la que cedió la explotación de sus derechos de imagen. En el caso del portugués fue mucho antes de llegar a España como director técnico del Real Madrid. Fue en el 2004, el mismo año en el que se proclamó vencedor de la Champions League con el F.C. Porto.
No obstante, de lo que lo acusó la Hacienda española fue de lo mismo que a los demás protagonistas de estas líneas. De eludir el IRPF de sus beneficios por derechos de imagen formando una sociedad offshore en un paraíso fiscal para gestionarlos, que luego, a su vez, cedió dichos derechos a MIM y Polaris, en Irlanda. El portugués, consciente de haber podido cometer un delito, no quiso ni siquiera llegar a juicio y se declaró culpable llegando a un trato previo con la Fiscalía.
Ángel Di María
El argentino Ángel Di María también alcanzó un acuerdo con la Fiscalía y la Abogacía del Estado por el que el futbolista admitió un doble delito fiscal al haber defraudado 1,3 millones de euros en relación a sus derechos de imagen.
Fue en los ejercicios de 2012 y 2013 cuando el argentino, que militaba entre las filas del Real Madrid, defraudó al Fisco. El futbolista, actuando exactamente igual que sus compañeros de profesión, diseñó una estructura societaria para evitar los pagos a Hacienda. Concretamente, cedió sus derechos de imagen a Sunpex Corporation Inc, radicada en Panamá y de la que él era el único accionista. Posteriormente, esta firma cedió los derechos a MIM y Polaris, las sociedades que forman parte del conglomerado del agente Jorge Mendes en Irlanda.
Fabio Coentrao
Coentrao fue otro de los implicados en temas de fraude fiscal. Sin embargo, el lateral portugués regularizó su situación nada más ser denunciado ante la Fiscalía, evitando ir a juicio. Tuvo que pagar 1,7 millones de euros a la Agencia Tributaria.
Se le acusó de haber ocultado al Fisco 1.291.398 euros. El futbolista suscribió en 2011 un contrato por el que simulaba la cesión de sus derechos de imagen a la sociedad Rodinn Company INC., domiciliada en Panamá. Como no podía ser de otra forma, y de forma idéntica a la de los demás representados por Mendes, la sociedad panameña cedió sus derechos a MIM y Polaris.
Radamel Falcao
El colombiano también tiene una condena en firme por la que tuvo que aceptar 16 meses de prisión y pagar 9 millones de euros. Fue condenado por dos delitos fiscales por fraude en las declaraciones de la renta de 2012 y 2013.
El entramado empresarial en el que se vio envuelto Falcao fue el más complejo de todos. Por un lado, y como el resto de acusados, el colombiano “simuló la cesión de sus derechos de imagen” a la sociedad colombiana Business Tiger SAS en 2011, y poco después pasaron a Fardey Overseas SA, domiciliada en las Islas Vírgenes Británicas. A su vez, esa empresa estaba participada al 100% por la sociedad Mandrin Nominees SA, con domicilio social en Panamá. Finalmente, los derechos de imagen, como en los demás casos, fueron cedidos a las sociedades irlandesas Multisports & Image Management y Polaris.
Por otro lado, la mayor acusación era la del año 2013, cuando según Hacienda, Falcao pasó en España más de seis meses, el mínimo necesario para tributar. Ese fue el año de su traspaso al Mónaco y la acusación sostuvo que pese a que el futbolista firmó su contrato con el Mónaco antes del 30 de junio, siguió unos días más en nuestro país. Por lo que pasó en España 191 días, ocho más del mínimo legal para ser residente fiscal.
Diego Costa
El hispano-brasileño ha sido el último que ha sonado como presunto defraudador de Hacienda. Ayer, El Mundo publicaba la noticia de que el delantero había sido denunciado ante la Fiscalía por un presunto delito fiscal.
El supuesto fraude tendría también relación con dinero procedente de los derechos de imagen. Más concretamente con un contrato firmado con Adidas en 2014 que proporcionó a Costa unos beneficios de en torno a 800.000 euros. Sin embargo, en este caso las informaciones publicadas por El Mundo sugieren que la irregularidad reside en no haber declarado en España ese dinero porque fue en 2014 cuando se fue al Chelsea. A pesar del traspaso, Costa habría residido en España más de 183 días en 2014, por lo que debió haber declarado ese dinero en nuestro país.
Es el ejemplo más reciente y pocas conclusiones se pueden sacar hasta que la justicia no haga su trabajo. Lo que sí sabemos a ciencia cierta es que Diego Costa tiene el mismo agente que los demás futbolistas a los que se refiere este texto, Jorge Mendes.