Bajo la intensa lluvia parisina, la 125ª edición del Torneo VI Naciones se inició en la noche de ayer viernes lejos del guión esperado, al menos durante la primera mitad del Francia-Gales. Aupados por su delantera, los franceses, en plena crisis de identidad e inmersos en un cambio de ciclo, desecharon todas sus dudas esperadas para dominar completamente el juego y también el marcador, que podría haber sido mayor de haber estado acertado Parra en las conversiones a palos (el galés Anscombe también se mostró errático en el pateo en esa primera mitad). Al descanso, el 16-0 favorable a los jugadores de Jacques Brunel se antojó justo con lo visto en el césped del Stade de France, con un cuadro galés, uno de los grandes favoritos al título, sorprendido por el enérgico comienzo francés, lleno de fuerza y velocidad. Los veteranos Picamoles y Huget ya habían conseguido dos ensayos en los primeros diez minutos y seis puntos más tras un golpe de castigo y un drop de Lopez, relevo de Parra en los lanzamientos a palos, pusieron la considerable ventaja local al llegar el tiempo de asueto.
Pero el partido no estaba decidido y, en la reanudación, Gales sí que demostró su condición de favorito tras su notable año 2018, ayudado sobre todo por la propia Francia, que no supo administrar su ventaja y protagonizó grandes errores que terminaron por ser definitivos para encajar la primera derrota del torneo. En apenas veinte minutos, los ensayos de Tomos Williams y de North (con las consiguientes conversiones, ahora sí, de Anscombe) y un golpe de castigo de Biggar pusieron por delante en el marcador a los de Warren Gatland (16-17) y, a pesar de que el XV del Gallo se resistió a perder con otro golpe de castigo transformado por Lopez (19-17), de nuevo North aprovechó en el minuto 71 otro fallo de bulto de Vahaamahina en jugada a la mano (en el primer ensayo de North había sido Huget el que cometió el error) para anotar el ensayo definitivo (19-24) que dio la victoria a los Dragones.
Mientras, el sábado, el cauce previsto para este Torneo VI Naciones volvió a la normalidad entre el tradicional sonido de las gaitas y con la nieve acumulada en los laterales de Murrayfield. A pesar de que Italia se adelantó con un golpe de castigo transformado por Allan (0-3), el encuentro fue un auténtico monólogo de Escocia, que durante muchos minutos desarrolló un juego de excelso nivel, especialmente después de transformar su tercer ensayo. En la primera mitad, el XV del Cardo, que en realidad estaba siendo superior pese a esa primera patada a palos de los italianos, respondió rápidamente con dos ensayos de Kinghorn en los primeros veinte minutos para dejar el choque al descanso 12-3, después de que Lidlaw sólo fuera capaz de transformar una de las dos conversiones a palos.
Tras la reanudación, Italia no pudo soportar el alto ritmo del equipo escocés, dinámico, profundo y veloz en el juego a la mano. Hogg logró el tercer ensayo en el minuto 47 (19-3, con la transformación de Laidlaw) y, apenas siete minutos después, los jugadores de Gregor Townsend certificaron el bonus ofensivo con su cuarto ensayo, el tercero de Kinghorn (26-3, con los dos puntos de Laidlaw). Los escoceses todavía lograron un ensayo más, por medio de Harris (33-3 minuto 62), pero, cuando el partido estaba llamado a finalizar silenciosamente, una amonestación a Berghan en el minuto 70 cambió por completo su dinámica en el tramo final. Con un jugador más sobre el campo, los italianos lograron anotar tres ensayos (Palazzani, Padovani y Esposito) para hacer bastante menos sonora su derrota (33-20) y, especialmente, para coger algo de autoestima de cara a lo que le queda por venir.
Porque lo que queda por venir son, entre otros, Irlanda e Inglaterra, que regalaron un auténtico partidazo al público presente en el Aviva Stadium de Dublín. Ni siquiera habían pasado dos minutos de partido y el XV de La Rosa, durísimo y sólido en la primera mitad, ya se había adelantado en el marcador merced a un ensayo de May transformado por Farrell (0-7). En ese periodo inicial, los irlandeses, que gozaron de diez minutos de superioridad numérica tras la amarilla a Curry, se mostraron tremendamente precipitados en el juego a la mano a pesar de dar la vuelta al marcador con un golpe de castigo de Sexton y un trabajado ensayo de Healy (10-7). Fue un espejismo: Daly volvió a poner por delante a los de Eddie Jones tras un grave error de Stockdale, el mejor jugador de la edición del 2018, al tratar de anular la jugada (10-14 minuto 30) y, aunque el XV del Trébol se libró milagrosamente de encajar un nuevo ensayo, la primera mitad se cerró con una nueva anotación a palos de Farrell que amplió la renta visitante hasta los siete puntos (10-17).
Ya en la segunda parte, Inglaterra continuó con el mismo nivel de dureza (el XV de La Rosa acumulaba siete faltas en el minuto 54), lo que hizo que Irlanda, sin gozar de la posesión del oval, no supiera demostrar el juego que le llevó a ser el mejor conjunto del rugby mundial el pasado año. No en vano, aunque un golpe de castigo de Sexton redujo la diferencia a cuatro puntos (13-17 minuto 55) y que Farrell no acertó con el suyo poco después, dos ensayos de Slade y otro golpe de castigo del citado Farrell (20-32, tras un ensayo en el último minuto del irlandés Cooney) certificaron la primera (y relativa) sorpresa de la edición 2019 del Torneo VI Naciones. El Millennium Trophy es inglés, con bonus ofensivo incluido. Y ahora también el favoritismo al título.
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[…] Sin embargo, en la segunda mitad llegó el bello canto al rugby de los jugadores de Warren Gatland. Superiores en el juego por alto y en el de patada (sublimes Liam Williams y Josh Adams en la primera parcela y Dan Biggar en la segunda), los Dragones fueron minando la autoestima de unos ingleses perdidos entre penalizaciones y sin capacidad de reacción ante el continuo juego disputado en su parte del campo. De tal modo, dos golpes de castigo de Anscombe equilibraron el marcador (9-10) y, a pesar de que Farrell acertó de nuevo en su tiro a palos (9-13 minuto 63), el XV del Dragón se puso por primera vez por delante tras un ensayo de Hill después de una jugada interminable protagonizada por la voluntariosa delantera galesa (16-13 minuto 68). Un último ensayo de Adams a falta de dos minutos para el final cerró el encuentro (21-13) y llevó la algarabía a la grada del Principality. Gales empieza a verse campeona en lugar de una Inglaterra que, aunque ayer dio un paso atrás, todavía mantiene intactas todas sus opciones. […]