De aquellos polvos vienen estos lodos, que dice el refrán. De la goleada en Dortmund y de la inexplicable falta de gol en Brujas vino este Atlético-Juventus. De una fase de grupos en la que sólo se consiguió ganar fuera al débil Mónaco vino un sorteo en el que no se estaba en el bombo 1 de los primeros de grupo, sorteo en el que cualquier emparejamiento, en teoría, sería más difícil para llegar a la cita en el Metropolitano.
De aquellos polvos vienen estos lodos, que dice el refrán. Refrán que el Instituto Cervantes identifica con error, desgracia, causa y efecto: «La mayor parte de los males que se padecen son la consecuencia de descuidos, errores o desórdenes previos, e incluso de hechos aparentemente poco importantes», reza la definición. Y sí, sobre el papel el cruce con la Juventus puede parecer una desgracia, una piedra demasiado grande para poder llegar vivo al 3 de junio. Porque, seamos sinceros, el sorteo ha sido cruel con un Atlético que quería evitar a toda costa al equipo italiano, que es ahora mismo el equipo más en forma de Europa.
Pero una vez resuelto el caprichoso azar del sorteo, y después de maldecir la mala fortuna, sólo queda mirar al frente. Porque es el único lugar en el que hay esperanza. Porque la plantilla rojiblanca está confeccionada y planificada para jugar partidos como éste, porque cualquier aficionado colchonero habría soñado (y no hace tanto) con poder enfrentarse a la Vecchia Signora en unos octavos de Champions, porque al Atlético le entrena el Cholo, el profeta del «si se cree y se trabaja se puede».
Porque claro que se puede. Porque puede que a Cristiano (bestia negra en Champions) le cuesten más los goles con el cambio de camiseta. Porque, aunque la zaga bianconera Bonucci-Chiellini sea temible, para esas fechas Diego Costa ya estará recuperado y con más hambre que nunca. Porque la vuelta se juega fuera de casa, como le gusta a Simeone, convencido de que beneficia en los cruces ya que, en caso de prórroga, hay 30 minutos extra en los que tus goles valen doble.
El sorteo ha podido ser cruel. Pero, en vez de maldecir a los dioses, sólo queda disfrutarlo. Disfruten.
[…] el momento en que la Juventus fue emparejada con el Atlético supuse que los dioses podían estar tramando algo. Sería muy propio de su ausencia total de […]
[…] un partido que se está jugando. Algunos lo han jugado hace 20 días y nosotros lo venimos jugando desde hace tres meses”. Así de obsesivo es el partido de hoy. 90 días en los que Atleti ha mudado varias veces de […]