La realidad actual de los Orlando Magic se define mejor con números. Primero, con el número seis, que son las campañas consecutivas que lleva la franquicia de Florida sin visitar la postemporada. Segundo, con el número uno, que sirve para identificar el número de temporadas que el club floridano ha alcanzado las 30 victorias en liga regular en esos seis últimos años. Tercero, con el número 335, que supone el total de derrotas (en 492 partidos) que han encajado en el citado periodo de tiempo. La reconstrucción de los Orlando Magic ha terminado convirtiéndose en una larga travesía por las derrotas y, pese a que no parece que vaya a cambiar en exceso en esta temporada que va a comenzar, al menos sí que se ve algo de optimismo en el futuro de una franquicia que jugadores como Shaquille O’Neal, Penny Hardaway, en los noventa, o Dwight Howard, en la primera década del siglo XXI, lograron llevar a la final de la NBA. Algo es algo.
Ese optimismo ha surgido alrededor de la figura de Mo Bamba, número 6 del pasado draft, expívot de la Universidad de Texas, 2’16 metros de altura y 240 centímetros de envergadura. Pese a que el poste nacido en Harlem de padres costamarfileños es un proyecto completamente todavía por hacer, no es tampoco menos cierto que, por condiciones, es uno de los jugadores que más alto puede llegar de la última camada de universitarios y, además, su dominio defensivo tiene que ser ya tenido en cuenta. Precisamente, desde ahí, desde la fortaleza defensiva, es desde la parcela que los Orlando Magic quieren crecer. Además de Bamba, el conjunto de Florida cuenta con Jonathan Isaac, otro número 6 del draft, en este caso del 2017, que también destaca por sus condiciones atléticas, y con Aaron Gordon, que ha renovado por cuatro años y 84 millones de dólares para convertirse en el tercer lado del triángulo que tiene que liderar a los floridanos. Mientras, jugadores como Evan Fournier y Nikola Vucevic aportarán puntos en una plantilla sin un base sólido (¿D.J. Augustin?, ¿Jerian Grant?) y con pocos cambios a destacar (Mario Hezonja se ha ido a los Knicks, ha llegado Timofey Mozgov desde Brooklyn). Salvo en el banquillo, donde Steve Clifford, tras ser despedido por los Charlotte Hornets, reemplazará a Frank Vogel, que en sus dos temporadas en Orlando apenas se pudo acercar a las buenas sensaciones que dejó en los Indiana Pacers, a los que llevó a los playoffs en cinco de sus seis temporadas como head coach. Y quizá también los playoffs parezcan todavía algo lejanos para los nuevos Orlando Magic de Steve Clifford, pero ese es el objetivo que aparece claramente delimitado en su horizonte a medio plazo. La larga envergadura de Mo Bamba parece el mejor camino para poder lograrlo.
- Entrenador: Steve Clifford (1ª temporada).
- Jugador estrella: Aaron Gordon.
- Otros jugadores determinantes: Evan Fournier, Nikola Vucevic, Mo Bamba.
- Balance 2017/2018: 25 victorias y 57 derrotas, penúltimo de su división.
- Objetivo 2018/2019: Crecer a base de victorias.
- El pronóstico de Luis Bustos: No alcanza los playoffs.
- El pronóstico de Sergio Alberruche: No alcanza los playoffs.