Rafa Nadal continúa con paso firme hacia su título 11º en el Torneo Conde Godó, después de ganar en octavos de final al albaceteño Guillermo García López (69º del ránking) por 6-1 y 6-3 en una hora y 19 minutos. El número uno del mundo se enfrentará en cuartos al eslovaco Martin Klizan (140), que derrotó a Feliciano López (30) por 6-4, 2-6 y 6-4 y que en la ronda anterior había eliminado a Djokovic (12).
El triunfo de Nadal no sólo enfila al mallorquín hacia un nuevo título, también engorda sus récords estratosféricos en tierra batida. Ya son 40 los sets que ha ganado de forma consecutiva, cinco más de los que encadenó el argentino Guillermo Coria entre 2003 y 2004, su perseguidor más cercano. Su porcentaje de victorias sobre polvo de arcilla alcanza el 91,93% (398 victorias y 35 derrotas) y minimiza los registros de Bjorn Borg, que se quedó en el 86% (251 triunfos y 41 derrotas), o Ivan Lendl, que se impuso en el 81,1% (327-76) de sus encuentros sobre tierra.
El duelo contra García-López no tuvo mucha historia, porque Nadal se encarga de aniquilar cualquier intriga. El consuelo del perdedor fue maquillar un marcador que, por momentos, se antojaba que sería de escándalo. Aunque dejó detalles de sus magníficos golpes desde el fondo de la pista, no está siendo la mejor temporada del tenista de La Roda. En la presente campaña ha vencido en siete partidos y ha perdido diez (176.000 dólares en ganancias). No levanta una copa desde 2015, cuando se impuso en Bucarest y Zagreb. Antes, se había proclamado campeón en Casablanca (2014), Bangkok (2010) y Kitzbühel (2009).
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