La convocatoria del Real Madrid para el partido de Éibar tardó en salir, y sinceramente, creo que nos deja a todos algo sorprendidos. Durante todo el día los rumores sobre las posibles rotaciones de Zinedine Zidane de cara a este partido se fueron sucediendo. Primero Ronaldo, después Kross y Luka Modric , hasta Keylor Navas parecía que podría rotar. Pues nada de eso, los que se quedan en casa son curiosamente los mismos que, junto con Isco, entrenaron en el Parque de Los Príncipes de París al finalizar el partido del pasado martes.
Algo raro pasa si Achraf, Vallejo, Llorente, Ceballos y Borja Mayoral no viajan con el equipo a un campo donde el Madrid no conoce la derrota. Y que, con todo el respeto del mundo para el Éibar, era un lugar propicio para que esta nueva hornada de jugadores merengues hicieran ver su valía de cara a este último tramo de temporada. Todos van a ser necesarios para mantener una intensidad mínima en la competición liguera, para que el equipo no entre en el tedioso «dejarse llevar” que vimos en Cornellá la pasada semana.
La realidad es que los cinco son una clara apuesta de el presidente Florentino Pérez. De todos es sabido que la apuesta venía directamente del despacho de arriba y que el entrenador galo no estaba por la labor en muchos de esos casos. Pero donde manda patrón… Y la misma realidad dicta que definitivamente parece que Zidane ha decidido ya que las oportunidades se acabaron y que los «fichajes del presidente» van a pasar mucho más tiempo en Valdebebas que en ningún sitio.
Zidane, un entrenador que maneja códigos de futbolistas, lo demuestra en casos como el de Asensio, Lucas Vázquez e incluso Kovacic. Con Zidane va a jugar aquel que se lo merezca, se llame como se llame y lo fiche quien lo fiche. Parece ser que el francés está dándole la vuelta a la tortilla en su personal pulso con el presidente. Y la eliminatoria de Champions le ha dado muchísimo crédito entre la afición, que ya no cuestiona cada una de sus decisiones. El núcleo duro de la plantilla siempre ha estado con él y no hay que olvidar que el fútbol es de los futbolistas. Así que Florentino Pérez tendrá que ver como este sábado a las 13:00 horas tan solo Theo Hernández estará en Ipurúa. Ninguno de los otros fichajes de este verano estará ni en el campo, ni en el banquillo, ni en la grada. Zidane no se arruga… ni ante Florentino.