Mikel Landa (Movistar) ganó la etapa reina de la Tirreno-Adriático, al imponerse en la cima del Sarsano-Sassotetto al polaco Majka (Bora) y el neozelandés Bennett (Lotto Jumbo). El nuevo líder de la carrera es el italiano Damiano Caruso (BMC), que ya vistió el maglia azurra después de la primera etapa y que se vio beneficiado por la avería que sufrió al anterior líder, Geraint Thomas (Sky) a falta de un kilómetro. Tras Caruso, aparecen en la general el holandés Kelderman (Lotto-Jumbo), a once segundos, y el propio Landa, a 20.
Mikel Landa atacó a falta de 2,7 kilómetros y atrapó a un grupo de fugados en el que se encontraban Majka, Aru, Miguel Ángel López y Hermans. Con ellos circuló hasta los últimos metros, cuando aprovechó un ataque de Bennett para salir a su rueda e imponer su mejor condición.
Por detrás, Geraint Thomas se veía descabalgado de la pelea por mala suerte. Quiso remontar con ayuda de Froome, que se había quedado del grupo de favoritos, pero sólo pudo minimizar los daños.
Landa, que estrena victoria con el maillot de Movistar, demuestra que se le da bien correr en Italia, donde ha sido tercero en el Giro (2015), además de ganar tres etapas de esa misma carrera y la general del Giro del Trentino (2016). «Estoy en un gran equipo y no hay mejor manera de comenzar la temporada que con un triunfo», comentó Mikel.
?♂️ @MikelLandaMeana! Che vittoria! | What a victory!#TirrenoAdriatico pic.twitter.com/017YIDbTDy
— Tirreno Adriatico (@TirrenAdriatico) March 10, 2018