Jamie Carragher jugó 719 partidos para el Liverpool, y vio tres veces la tarjeta roja. Marcó cinco goles y dejó la estela de un tipo sensato. Esta vez la ha liado gorda. Sky Sport le va a suspender el contrato después de que en un atasco, a la salida de Old Trafford el sábado pasado, tras el United-Liverpool, escupiera a un aficionado que se reía de él y de la derrota de los rojos de Anfield. El seguidor lo grabó con su teléfono y en la imagen se aprecia como el salivazo impacta en el asiento del acompañante donde viaja … ¡su hija de catorce años!
“Es el peor error de mi vida, cometí muchos, pero este es el peor”, ha dicho el que fuera capitán del Liverpool, que también ejerce de comentarista para The Telegraph y que la semana pasada, un día antes del incidente, mantuvo una larga entrevista con Pep Guardiola. Sky Sports, a través de un portavoz autorizado, ha dicho que se toma este asunto muy en serio: “Su conducta esta muy por debajo de los estándares de lo que esperamos de nuestros empleados”. El que fuera capitán del Liverpoool ya no apareció ayer en la transmisión del Stoke-City.
En una columna escrita en el 2005 para el Daily Mail, según recordaba ayer un artículo en The Guardian, Carragher criticó que los futbolistas escupieran a los compañeros en el campo: “A mí me ocurrió una vez, jugando contra el Celta de Vigo. Fue Mostovoi quien lo hizo y me pareció increíble su reacción”, dijo.
38 veces internacional con Inglaterra, Carragher, que cobra un millón de libras anuales de Sky Sports por sus comentarios, bastante certeros, por coherentes, tampoco participará esta noche de la transmisión del partido del Sevilla en Old Trafford para televisión danesa TV3. Peter Norrelund, productor de la cadena, aseguró que trataban de protegerlo: «No hemos querido que fuera a Old Trafford, era como meterlo en la guarida del león”.
“Mi comportamiento fue inaceptable, un momento de locura difícil de explicar”, ha dicho antes de aclarar que ya ha hablado con la familia a la que escupió desde su coche. “Volveré a hacerlo y me disculparé adecuadamente. No vi a la niña en el coche, no la vi. Desearía que no estuviera involucrada, odio saber que esta metida en esto… Me resultaría difícil saber qué pensaría si me sucediera a mí, si sucediera con mi hija”. Mia, la hija del que fuera central, tiene aproximadamente la misma edad que la hija del tipo que le increpa en la grabación y que viaja en el coche sobre el escupe y que le ha costado la cuarta roja de su carrera.