Los bronces logrados por Regino Hernández en snowboard cross y de Javier Fernández en patinaje artístico en los Juegos de Pyeongchang han supuesto un hito histórico para el deporte nacional, ya que es la primera vez que España consigue dos medallas en una cita olímpica invernal. Ambos escribieron una nueva página en la historia de los deportes de invierno nacionales que hasta ahora solo conocían los hermanos Paquito y Blanca Fernández Ochoa. Blanca logró el bronce en la prueba de eslalon en Albertville 1992 y Paquito se hizo con el oro en Sapporo 1972 en la misma modalidad.
El ceutí coronó su inmaculada competición con una gran final en la que salió en tercera posición y en la que en todo momento tuvo opciones de subir al podio. Una caída a mitad de la prueba dejó solos arriba al favoritísimo, el francés Pierre Vaultier, que logró el oro, y el australiano Jarryd Hughes, que fue plata, junto al español, que se quedó a pocos metros del segundo puesto.
El rider de 26 años afincado en Málaga fue el único de los tres españoles que consiguió superar la primera ronda eliminatoria. Lucas Eguibar se cayó en los primeros compases de la carrera y dijo adiós a su participación en la cita coreana en octavos, lo mismo le ocurría a Laro Herrero, el cántabro terminó en quinta posición, a sólo una de los puestos que daban el pase a la siguiente ronda.
En el mismo deporte pero en la modalidad de halfpipe, una caída en la tercera manga de la final dejó fuera del podio a la catalana Queralt Castellet pero le sirvió para conseguir un séptimo puesto que supuso un diploma olímpico, el noveno de la historia en deportes de invierno para España. Aún así Castellet logró su mejor resultado en sus cuartos Juegos después de ser vigesimosexta en Torino 2016, duodécima en Vancouver 2010 y cuatro años más tarde, undécima en Sochi.
A Javier Fernández el destino le devolvió en la cita coreana lo que le quitó hace cuatro años en Sochi tras quedarse a las puertas del podio. Con una puntuación global de 305,24, el patinador madrileño logró el único metal que le faltaba para cerrar un espectacular círculo donde ya lucían seis europeos consecutivos y dos mundiales. Su compañero de entrenamiento Hanyu se volvió a vestir de oro tras sumar 317,85 puntos, seguido de su compatriota Shoma Uno, que le arrebató la plata al español por centésimas (306,90).
El otro español participante fue Felipe Montoya que acabó vigésimo noveno en el programa corto, con 52.41 puntos, por lo que no pasó el corte y no disputó al día siguiente el programa libre que decidió la prueba. Sin embargo, la pareja de danza formada por Sara Hurtado y Kirill Khaliavin finalizaron en una más que brillante duodécima posición, dando un paso más en su progresión. La madrileña y el patinador de origen ruso se quedaron a cinco puntos de la décima plaza y como la sexta mejor pareja europea. Con un global de 168,33 puntos mejoraron el hasta ahora mejor puesto de España en unos Juegos: el decimotercero que Sara Hurtado junto a su anterior compañero Adriá Díaz lograban en la cita rusa.
En skeleton, Ander Mirambell consiguió remontar del puesto 25 al 23 pero por 81 centésimas se quedó fuera del Top 20 para poder participar la cuarta y definitiva manga. Pero el catalán también se marchó de Corea del Sur con su mejor registro en una cita olímpica. En Sochi quedó el 26, mientras que cuatro años antes en Vancouver fue el 24.
Imanol Rojo y el debutante Martí Vigo, eran los representantes españoles en esquí de fondo. El veterano vasco participó en cuatro pruebas, siendo el español que más ha disputado, mientras que el aragonés solo en dos. Rojo fue 49º en skiathlon 15 km+15 km y 35º en los 50 km estilo clásico. En 15 km libre el vasco ocupó el puesto 62 mientras que Vigo no terminó la competición. Pero los fondistas españoles firmaron una meritoria decimonovena posición en la prueba de esprint por equipos en estilo libre. Décimos en su semifinal, el vasco y el aragonés obtuvieron la decimonovena posición general con una marca de 16:59.83. Era la primera vez que España participaba en la prueba por equipos.
En esquí alpino Juan del Campo y Quim Salarich no tuvieron tanta suerte. En la prueba de gigante donde solo participaba Del Campo, arriesgó para mejorar puestos y se acabó cayendo en la segunda manga. Mientras que dos días mas tarde en slalom masculino el vasco en la primera manga y el catalán en la segunda, se salieron y no pudieron completar el recorrido quedando sin posibilidad de cerrar un resultado.