Corea del Norte sí participará en los Juegos Olímpicos de Invierno que se celebrarán del 9 al 25 de febrero en la localidad surcoreana de Pyeongchang. Así lo anunció el viceministro de Unificación de Corea del Sur, Chun Hae-Sung, después de la reunión mantenida entre las dos Coreas en Panmunjom, localidad de la zona desmilitarizada ubicada en la frontera común.
El gobierno de Corea del Norte enviará deportistas y una delegación de alto nivel, además de espectadores, artistas y un equipo de exhibición de taekwondo, según informó a la prensa Chun Hae-Sung.
Esta reunión es la primera que se produce cara a cara entre las dos delegaciones desde hace más de dos años y se ha llegado a ella después de un periodo de gran tensión.
Todo cambió con el discurso de Año Nuevo del líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, quien aseguró que se estaba planteando enviar una delegación de deportistas a los JJOO de invierno. El presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, respondió diciendo que era «una oportunidad sin precedentes» para intentar un acercamiento entre los dos países.
El Gobierno de Corea del Sur ha propuesto que las dos delegaciones desfilen juntas en la ceremonia inaugural y ha planteado la posibilidad de efectuar reuniones entre familias divididas a los dos lados de la frontera. Este encuentro se produciría durante el Año Nuevo Coreano el 16 de febrero, un día después del comienzo de los Juegos.
Además, el gobierno de Corea del Sur estudiará, junto a Naciones Unidas, la posibilidad de suspender temporalmente las sanciones a sus vecinos del Norte. Para rebajar la tensión, y a petición de Kim Jong-un, Corea del Norte y Estados Unidos anunciaron que suspenderán las maniobras militares que tenían previstas para las próximas semanas.
Y para evitar «choques accidentales», Corea del Sur quiere establecer conversaciones entre las fuerzas militares de los dos países.