Marvel vuelve a estar de enhorabuena. Como antesala al próximo y deseadísimo regreso de la fastuosa Jessica Jones, Netflix ha decidido regalarnos una pequeña dosis de ansiedad a través de la primera imagen de la que será la segunda temporada de la serie que protagoniza la detective más polémica de Nueva York. Sin fecha de estreno todavía, es cierto que la píldora de la felicidad se nos queda algo corta, sin embargo, alimenta nuestras expectativas tras una primera temporada elevada por la crítica (y por una servidora) a la categoría de obra maestra.

Para los neonatos, Jessica Jones (Krysten Ritter), detective privada en Nueva York, está reconstruyendo su vida después de haber eliminado a su peor enemigo, Kilgrave. La ciudad ahora la conoce como una asesina con súper poderes, pero un nuevo caso hará que Jessica deba enfrentarse a sí misma y tenga que remover de nuevo los entresijos de su pasado.
Personalmente, devoré la primera temporada de Jessica Jones. Una investigadora malhablada, con tendencia al alcoholismo y a la autodestrucción. Su mal humor es una heroína para todos aquellos que nos sentimos atraídos por los antihéroes. No lleva malla, aviso a tripulantes. Calza botas altas de soldado raso y una chupa de cuero que a saber cuánto tiempo lleva sin pisar una tintorería. Vive en un apartamento de mala muerte en Manhattan y si no fuera porque se lo bebe con extrema rapidez, hasta se inyectaría whisky del bazar chino de la esquina. Es otra serie donde Marvel se deja de tonterías y apuesta por la violencia explícita e incluso por el sexo. Sí señores, Jessica Jones no es ninguna frígida, y eso también ha quedado destapado bajo el velo de abstinencia que la factoría corría sobre sus películas más famosas.
Han pasado ya dos años desde que se estrenó la primera temporada de la serie de Netflix, un 20 de noviembre de 2015 (no somos nada), y la plataforma siempre ha jugado con el misterio de si habría o no continuación y second round para nuestra querida Jessica. Ahora que hemos confirmado su retorno, no nos queda más que esperar que maneje las fórmulas del éxito de la primera y que alcance, si fuese posible, las siete vidas.