José María del Nido Benavente, expresidente del Sevilla, seguirá adelante con su planteamiento para retomar el poder en la sociedad anónima sevillista, a pesar de perder -por no demasiado margen- todas las votaciones de la Junta de este pasado lunes 11 en las que se midió con el actual Consejo del Sevilla y sus accionistas defensores. Del Nido acreditó un total de 26.029 acciones… pero todavía cuenta con aglutinar a plazo corto-medio nuevas sumas importantes de títulos: siempre, tras rematar una serie de gestiones legales. En general, el expresidente y su grupo familiar y de accionistas valoraron la Junta del lunes como ‘de tanteo’. Del Nido también espera garantizarse a medio plazo el apoyo de José Gómez Miñán, que abandonó el llamado ‘Grupo de Utrera’ (principal apoyo del presidente Castro) y mantiene un total aproximado de acciones en torno al 3,5%. Durante la Junta, Gómez Miñán se sentó al lado de Del Nido, sus hermanos y su hijo, aunque no terminara adhiriéndose a sus propuestas.
Durante su primera intervención en la Junta, Del Nido sí hizo una revelación importante: que Javier Tebas, actual presidente de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) y amigo personal del expresidente sevillista, fue a visitarle en la cárcel (cuando, obviamente, Del Nido ya no era presidente del Sevilla) para debatir el nuevo reparto de derechos televisivos: que los presidentes de la LFP ya tenían aprobado ‘de facto’. Pero Tebas quería que Del Nido le comunicara sus impresiones sobre el nuevo acuerdo. «Luché como un Quijote contra los molinos de viento para el reparto de los derechos televisivos», relató Del Nido, quien también propuso que el Sevilla se plantee un crédito de 150 millones de euros, pagaderos en 40 años, para reformar completamente el actual Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán y dejarlo como una construcción virtual de nueva planta, con capacidad para 60.000 espectadores. También dijo el expresidente que «los pueblos que olvidan su historia están condenados a repetirla». Continuará.