Fernando Torres ha recibido una oferta del Beijing Renhe de la Superliga de China para incorporarse en enero por el doble de lo que gana en el Atlético de Madrid. En principio, Torres ha rechazado el ofrecimiento (unos ocho millones de euros) y espera terminar su contrato con el Atlético, que finaliza el próximo mes de junio, cuando ya habrá cumplido los 34 años.
El Beijing Renhe está entrenado por el español Luis García Plaza, formado como futbolista en las categorías inferiores del Atlético (del infantil al filial), y que en España entrenó a Levante (2008-11) y Getafe (2011-14). Después de pasar por los Emiratos Árabes (Baniyas SC), Luis García recaló el pasado verano en el Beijing Renhe, con el que ha logrado el ascenso a la Superliga y se ha ganado la renovación.
El pasado verano, la Superliga restringió la presencia de jugadores extranjeros en su competición y estableció que sólo se pueden utilizar tres por partido (nunca el portero), aunque cinco puedan incluirse en la convocatoria. Antes, el cupo de extranjeros era de cuatro jugadores foráneos siempre y cuando uno de ellos fuera de un país asiático. La nueva normativa también impone a los equipos la alineación de un jugador Sub-23 por encuentro. En la plantilla del Beijing Renhe hay dos futbolistas extranjeros, el internacional ecuatoriano Jaime Ayoví y el brasileño Ivo, ex del Palmeiras.
La Superliga china parece el destino de Javier Mascherano, de la misma edad que Torres, si finalmente abandona el Barcelona en enero. Allí se encontraría con viejos conocidos del fútbol internacional como Tévez, Lavezzi, Pato, Óscar, Ramires, Obi Mikel, Witsel, Jonathan Soriano, Hulk o Pellé. Además de Luis García, hay otro entrenador español en el torneo, Gregorio Manzano (Guizhou Zhicheng).
Fernando Torres renovó su contrato con el Atlético el pasado verano y hasta el próximo junio. Que el club no pudiera fichar por la sanción del TAS fue determinante para la continuidad del delantero madrileño, pero su posición cambiará el verano que viene. Entonces, el interés chino podría verse con otros ojos.
