Noviembre es un mes de bigotes. Los del rugby los lucimos concienzudamente en Movember (contracción en inglés de Moustache y November) intentando concienciar en la lucha contra el cáncer de próstata. Un mes de bigotes y, sobre todo, un mes de Rugby. Con mayúsculas. La hoja del calendario trae la visita de los países del Sur al Norte como epílogo anual. Este mes puede ser el colofón a un buen año, maquillar un discreto ejercicio o incluso salvar una temporada complicada. «Noviembre huele a barro, Rugby y cerveza. ¡Qué más se puede pedir!», advertía ufano el pilier inglés Fran Cotton, inmortalizado para la historia cubierto de lodo durante la gira de los Lions por Nueva Zelanda en el 77.

Fran Cotton, en el centro, en un partido de los Lions en la gira del 77 por Nueva Zelanda.
Fran Cotton, en el centro, en un partido de los Lions en la gira del 77 por Nueva Zelanda.

Precisamente 2017 ha sido año de Bristih & Irish Lions. Y precisamente de gira por Nueva Zelanda. Pero en esta ocasión con un calendario infernal para los turistas que han librado un desafío físico inhumano. Un tour que ha desmitificado en cierta manera a los All Blacks, derrotados en el segundo partido de la serie en casa por los europeos y que estuvieron contra las cuerdas en el partido decisivo, que concluyó con una salomónica igualada. La sensación es que Nueva Zelanda sigue estando muy por encima del resto, pero esto ha dejado de ser una certeza para convertirse en una percepción. Los kiwis han cosechado dos derrotas en la segunda parte del año, ante los Lions y los wallabies australianos. La primera coronó una gran batalla, la segunda fue más una emboscada dada la nómina de los de negro en Brisbane.

¿Cómo se gana a los All Blacks? Para plantearse esta empresa al rival se le sobreentiende la excelencia. Si atendemos a la victoria de los Lions, se les hace daño atacándoles por fuera, sin desordenarse en el galope tendido que proponen a través de su continuidad devastadora mientras maduran las defensas rivales con su kicking game. Desarmado el tópico de su debilidad en melé, donde han presentado registros de primer nivel, los neozelandeses dejaron entrever cierto déficit en la ocupación defensiva ante las estampidas del galés Liam Williams y obligando a salir de la cueva a su zaguero para perseguir comprometidos Up&Unders. La cuestionada fiabilidad del pateo de Beauden Barret, jugador que ha introducido el rugby en una nueva dimensión, también marca el devenir de sus partidos.

A Europa llegan con ausencias de renombre. Por temas físicos se han quedado en casa Owen Franks, Joe Moody, Brodie Retallick, Jordie Barrett, Israel Dagg, Nehe Milner-Skudder y Ben Smith. Especialmente preocupante, por la acumulación en la misma zona, es la baja de los tres últimos, titulares al final del pasillo del back-three neozelandés. Otro que no estará es Julian Savea, 54 caps y 46 ensayos. Lo más parecido a Lomu que ha pisado un campo, al que el seleccionador Steve Hansen ha desterrado en este 2017.

El mundo oval espera impaciente la batalla de los hemisferios entre Inglaterra-Nueva Zelanda, un partido que no se juega desde noviembre de 2014. Eddie Jones, el gurú que ha rearmado al XV de la Rosa, ha evitado a los kiwis durante su fase de construcción de la selección inglesa. Una vez consumada su obra, y tras laminar a sus rivales europeos, ha decidido testear el potencial real ante los All Blacks antes del Mundial de 2019. Pero no será este otoño, ocurrirá el el 10 de noviembre de 2018, en un partido que ya tiene colgada la etiqueta de final anticipada del Mundial.

El calendario de este noviembre aparece revuelto con equipos en plena reconstrucción a dos años vista de la Copa del Mundo, como Argentina, Australia, Gales o Francia. El rugby industrial de irlandeses y sudafricanos dilucidará cuál es la selección más física del mundo el sábado 11 en el Aviva de Dublín. Un partido donde no habrá rehenes. Casi todos llegan con los deberes a medio hacer, desde unos decepcionantes Pumas a la histriónica Francia, que se medirá en 72 horas dos veces a Nueva Zelanda en un más difícil todavía. Italia, Japón, Fiji y Georgia adornan el calendario, poniendo el toque exótico con mejores intenciones que resultados. ¿Y España? España sigue su trote amateur y se medirá a Brasil y Canadá pensando en el Mundial de Japón de 2019.

Enfríen las cervezas, reparen los tacos largos de las botas y calienten bien, llega Noviembre. Otoño es un mes que nunca acaba como empieza. Un mes que empieza con la testorena disparada y termina con los músculos entumecidos, los pulmones vacíos y el vestuario inundado por el aroma a linimento. La vieja Europa, la de taco largo. La que huele a humedad. La del barro, el Rugby y la cerveza de Fran Cotton. ¡Salud y rugby!

CALENDARIO DE TEST DE NOVIEMBRE

Sábado 4 Noviembre


Japón-Australia (Yokohama)
Barbarians-New Zealand (Londres)

 

Sábado 11 Noviembre


Italy-Fiji (Catania)
Escocia-Samoa (Edimburgo)
Inglaterra-Argentina (Londres)
Gales-Australia (Cardiff)
Irlanda-Sudáfrica (Dublín)
Francia-Nueva Zelanda (París)

Martes 14 Noviembre


France-Nueva Zelanda (Lyon)

 

Sábado 18 Noviembre


Italia-Argentina (Florencia)
Gales-Georgia (Cardiff)
Inglaterra-Australia (Londres)
Escocia-Nueva Zelanda (Edimburgo)
Irlanda-Fiji (Dublín)
Francia-Sudáfrica (París)

Sábado 25 Noviembre


Italia-Sudáfrica (Padova)
Escocia-Australia (Edimburgo)
Inglaterra-Samoa (Londres)
Gales-Nueva Zelanda (Cardiff)
Irlanda-Argentina (Dublín)
Francia-Japón (París)

Sábado 2 Diciembre


Gales-Sudáfrica (Cardiff)

2 Comentarios

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here