Han pasado siete años desde el incidente. Un joven (Oriol Pla, al que vimos como hijo de Ricardo Darín en la emotiva ‘Truman’) y su perro vagan por los gélidos paisajes desolados de una ciudad fantasma, una especie de Chernóbyl postapocalíptica donde sólo hay edificios abandonados y esqueletos de árboles que se recortan sobre los paisajes nevados.
Título: Graffiti.
Dirección: Lluís Quílez.
Reparto: Oriol Pla.
Nacionalidad: España.
Duración: 33 min.
Igual que el náufrago Tom Hanks en la peli de Robert Zemeckis se comunicaba con su inseparable pelota Wilson, el ‘prota’ de este corto, Edgar, busca a su interlocutor en medio de su inmensa soledad escribiendo graffitis con spray en una sucia pared de su guarida. Y le responden. Así, se produce un diálogo a través de los mensajes en la pared entre Edgar y una misteriosa joven, Anna. Lo que nos invita a descubrir este magníficamente realizado cortometraje es quién es esa chica que le responde a sus mensajes, ¿una presencia fantasmal, una personalidad desdoblada del propio Edgar o, quizás, los que establezcamos un diálogo con el solitario personaje seamos los espectadores? Hay que verlo para descubrirlo.