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Sí, los autores de ‘Dancing Queen’ también tuvieron fracasos, uno de los más sonados, hace cuarenta y tres años, en noviembre de 1974, en la gira que el grupo sueco realizó por varios países europeos tras ganar el Festival de Eurovisión con ‘Waterloo’ y después de publicar ‘So Long’, otro fiasco comercial y quizá el sencillo con menos éxito de la excelsa carrera de Agnetha, Björn, Benny y Anni-Frid. En Europa, Abba aún no contaba con la popularidad de la que sí disfrutaba en Escandinavia y la escasa demanda de entradas obligó a los organizadores a cancelar varios conciertos. Costalazo.
Ese paso atrás, ese pequeño revés, no impidió, claro está, que el cuarteto de Estocolmo se convirtiera, no mucho más tarde, en el grupo de Pop europeo más internacionalmente aclamado de todos los tiempos, cosechando éxito tras éxito (nueve ‘números uno’ en las listas británicas…), a través de multitud de giras por todo el mundo y de los ocho álbumes de estudio plagados de hits que grabaron hasta 1982, fecha de su separación definitiva. En 2008, Universal Music premió al grupo por haber vendido 375 millones de copias. Ahí es nada.
Durante muchos años, ABBA fue la segunda fuente de ingresos sueca en el extranjero, después de Volvo.